Vivimos tan corto espacio de tiempo sobre este planeta que cada uno de nuestros pasos debe estar encaminados a construir, más y más, el espacio soñado de la utopía. Construyámoslo conjuntamente: es la única manera de hacerlo posible.
César Manrique

"Los silencios de Punta de las Arenas" Libro de José M. Espiño.

Presentación multimedia del libro de José M. Espiño, "Los silencios de Punta de las Arenas" realizada por Ildefonso Rodríguez Ramírez con imágenes de este apartado y paradisiaco lugar.

Presentación multimedia libro Los silencios de Punta de las Arenas from Juan J.A. on Vimeo.

sábado, 16 de marzo de 2013

Carcajales-Tenteniguada (R.Tajinaste) 16-03-2013

Tajinaste azul
Hoy no tuvimos que madrugar, y a las nueve de la mañana salimos de la Fuente Luminosa rumbo a Telde en busca del resto de "expedición", desde aquí, ya con todo el grupo (con nuevas incorporaciones o reincorporaciones), llegamos a la parada de costumbre cuando nos dirigimos hacia la cumbre, el bar en Cazadores, y ya con las barriguitas contentas y con algunos bocadillos en las mochilas, salimos hacia el lugar de destino los Carcajales (creo que ese el nombre), por debajo del Pico la Gorra, y de este lugar fuimos hacia la presa de Cuevas Blancas y de esta bajamos por una piconera al naciente de agua llamado la Cueva del agua, después de esta refrescante vista, volvimos sobre nuestros pasos a  la presa, la dejamos atrás y cogimos el camino que nos lleva a Tenteniguada, pasando por el restaurante el Rinconcito (en el Rincón de Tenteniguada), algunos/as llegaron a este lugar sin hacer el camino completo, "el olor de la carne de cochino los atrajo". 
Pero antes de llegar a estos lugares contemplamos una exuberante vegetación, con el color verde de la mayoría de las plantas, el amarillo de las morgollanas, de algunas retamas, de los relinchones, las serrajas y entre todos estos colores destaca por su color y su singularidad El Tajinaste azul, su porte destaca especialmente en esta época del año, aparte de agradarnos a la vista, alimentan a muchos insectos y entre ellos a las laboriosas abejas.
Roque la Vela o del Águila
No solo la vegetación nos alegra el camino, también la contemplación de los Roques (Grande y Chico) y todo el paisaje que se despliega antes nuestros ojos.




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